Chove
intermináveis infinitas gotas puras
escorrem com gosto e pressa nenhuma
pela totalidade de folhas e telhados
o céu é uma enorme colcha branca
a cidade, verde e gris, criança com frio
pessoas-formiguinhas caminham abrigadas
em solenes guarda-chuvas negros
tudo descansa e a harmonia é aqui.
FELIPE:
de vez en cuando paso por acá.Me gusta tu poesía.
Había tanta risa y tanta locura en este blog que nunca pensé que tu destino era ser poeta serio y medio triste:) ¿dónde están los amigos? Ninguno dice nada!!!
O es que todos han enfilado para Facebook o sitios parecidos?
He retomado mi carrera de docente y ando tratando de educar niños de once años (¿quién lo creería?) por eso he abandonado, bastante, mi vocación de bloggera:)
Muy buenas tus fotos de tu pasaje por Uruguay en febrero.
El abrazo de siempre...¿cómo era?..Ah!.....demoledor:)
Todavía existís y encima leés mi bló. Qué honor, che.
Los amigos tienen cosa mejor que hacer, o peor, no sé, pero por ahí andan... Y todavía bebemos juntos, es cierto.
Me alegro por tu regreso a la escuela, tas pasando bien con los diablitos?
Y sólo puede ser broma cuando me decís poeta serio. Para probar que no, largo el próximo post.
Ya estuve como 3 veces en Uruguay desde dejaste la e-vida, lástima no vernos nunca.
Un abrazote otoñal!
patria pampa y libertad =)